Camino

Camino
al azar
por entre minas sin onda,
y evito a toda costa
ver mi reflejo
desabridas ellas
yo
tu
todos.
Tomo la micro, abrazo al cura, me dice “no seas maraco, hijo”, todos son iguales ante el supremo arquitecto, artífice arquetípico de la polarización y el ABC1 oligarca anticomunista. Que se mueran esas parias. (Los comunistas, digo)
Pero pienso en hacer algo que deje la cagá,
dejar de exponerte a mi aburrimiento distímico y mis polisílabos metalingüísticos
que desearía que entendieras con todo fervor y ternura alucinatoria.
¿¿Por qué el negar todas esas hueás que alguna vez pensaste,
y que en su momento no te parecieron ridículas
como ahora.
A la niña le gustan los pseudointelectuales, o los pseudoanarquistas.
Y quiero, thorazine.

(Esta es una creación colectiva de un individuo, fraccionado en mil)